Vigilando las puertas

//OFF: Si no hay problema, me gustaría narrar ésto, ya que soy el único narrador a parte de tí...

Léete la guia que he escrito.

ON:

En efecto, un ninja estaba oculto observando la travesía del ANBU. El ANBU no se había dado cuenta, pero tras varios minutos siguiéndole más cerca de lo normal, éste se dio cuenta.

-Me has descubierto, pero, ¿serás capaz de descubrirme? Dudo mucho que salgas de ésta, joven...-

El ninja que había estado ocultándose durante todo éste tiempo se mostró. Su cabeza estaba cubierta por un sombrero chino. Su rostro estaba vendado en su totalidad, y no se le podía ver nada de su cara. Iba vestido con una capucha, ancha que le ocupaba todo el cuerpo y que arrastraba por la arena. Las mangas eran bastante anchas y largas...:

-¡Kokuangyo no Jutsu!- gritó el desconocido.- Llámame Otoko (Hombre) Kurai (Oscuro). Te diré que yo también tengo curiosidad por saber más sobre las noticias que llegan sobre La Villa Oculta de la Arena. Y que me he topado contigo y he visto esa máscara y he pensado que sería divertido si te observaba desde lejos. Me he pasado de listo y me has detectado. Eres hábil, pero no sé si lo suficiente para escapar de mi ilusión. No quiero luchar, y menos matar a nadie, pero llevo mucho tiempo sin sentir el flujo del chakra por mi sistema circulatorio.-

Spoiler:

El joven ANBU se vio rodeado por una oscuridad provocada por el genjutsu de Otoko. El chico sintió como éste posaba una de sus manos en su hombro derecho y decía: ¿Cómo saldrás de ésta? Tras ésto, el joven dejó de sentir la mano de su hombro y empezó a soplar una brisa con arena, pero a pesar de eso, éste no podía ver nada.

Off: Guía leída.

On: La rápida aparición del Shinobi, seguida de su Genjutsu impresionó sinceramente al Anbu. Pero no iba a caer. Creó una capa de hueso bajo su piel, para prevenir. Se deshizo de su camisa para no romperla con su siguiente movimiento. Sabía que con ese Genjutsu, su rival tampoco sabría dónde se hallaba él, de no ser por los sonidos que emitiese. Daisuke juntó sus manos, formando el sello de la serpiente. La fina capa ósea se deshizo, y en cuestión de segundos, unos gigantescos huesos salieron de su cuerpo, formando una especie de erizo humano. El Anbu sabía lo que hacía. Instantes antes había grabado con exactitud la imágen del área, por loq eus e podría guiar sin necesidad de visión. Movió su cuerpo con elegancia, como si de una danza se tratase, con el único objetivo de herir al enemigo lo suficiente como para inmovilizarle, y más tarde, interrogarle.

Shimazu se había puesto a la defensiva. Analizó la situación y detectó que el Genjutsu era mutuo. El ninja que entraba en "El Viaje Oscuro" era incapaz de ver nada, pero igualmente, era invisible. Tras ésto usó su memoria para recordar el área en el que se hallaba y usar su barrera de sangre para defenderse. La del Clan Kaguya.

Por otro lado, Otoko disfrutaba de la situación, el ANBU no sabía que él si era capaz de ver a su enemigo. Él era conocedor de todo el combate, de hecho, ya había pensando en su siguiente movimiento. Y pensaba que su enemigo podría no salir de ésta, pero sabía que era un rival hábil y experimentado. Debería ingeniárselas para huir de su siguiente ataque.

-¿El Clan Kaguya? ¿Acaso usas tus huesos para luchar? ¡Qué vulgar!- comentó con mucha arrogancia.- ¿Sabrás escapar de la muerte sin tus ojos, joven ANBU?

En ese momento, el shinobi oculto retrocedió varios metros mientras realizaba una serie de sellos. Los sellos los realizaba de una manera muy rápida, mientras pronunciaba su nombre en voz naja. No podía evitar dejar al descubierto su próximo ataque, no quería acabar con su diversión tan rápido.

Otoko ya había dejado de hacer sellos y se disponía a pronunciar su técnica. Entonces, Otoko recitó:

-¡Doton Kekkai: Dorōdōmu!-

Spoiler:

De pronto, se empezó a crear una barrera de tierra que se disponía a encerrar a Daisuke y que lo haría en menos de un segundo.

El Shinobi pronto se vió atrapado en la técnica terrestre de Otoko, pero no le importaba. Sin dudar ni un solo momento ejecutó unos sellos y pronunció. Chidori Nagashi. Una enorme corriente eléctrica recorrió su cuerpo, y sus alrededores, anulando la técnica del rival. Daisuke dió unos pasos hacia atrás, y contestó a la pregunta del ninja. Es bonito hablar de la muerte cuando uno está a poco tiempo de experimentarla, pero... ese no voy a ser yo. Diciendo esto expandió todos sus huesos cargados aún con la electricidad del chidori en un radio de unos diez metros.

Sabía que el enemigo estaba cerca, y le sería muy difícil esquivarlo. Daisuke mostró una leve sonrisa. No estaba seguro de que ya estuviese muerto, por lo que se puso a pensar su siguiente movimiento a la par que recitaba el contra-genjutsu: Kai.

Otoko sonrió ante el Chidori Nagashi de Daisuke. No se esperaba que un ninja, en medio de un desierto, contrarrestase su barrera con un jutsu del elemento rayo. Y mientras pensó en una respuesta para su rival. Shimazu había sido tan hábil como él había calculado.

La onda expansiva que había ejecutado había dado de lleno en el cuerpo del hombre, pero en ningún momento éste había mostrado una muestra de dolor o sufrimiento. De hecho, al tener el rostro totalmente vendado y su cuerpo cubierto en su totalidad, habría sido imposible. Otoko aterrizó varios metros más adelante y se fue acercando lentamente al ANBU.

Pero había sido un gran fallo el mostrar un contra-elemento como el Raiton contra el Doton, pues ahora, Kurai sabía cómo devolverle los jutsus de ése elemento.

-Eres demasiado valioso para morir, has demostrado tu valía.- dijo firmemente el hombre.- Pero eso no quiere decir que no lo puedas pasar mal. En lo que me concierne, no moriré hoy.-

Otoko se acercó cada vez más rápido hacia Daisuke. Éste estaba usando un Taijutsu especial, Yusuru Gokei. Fue tal la velocidad que Otoko se volvió invisible para el ojo humano. Pero de pronto, apareció diez metros detrás de la espalda del joven ANBU y dijo:

-¡Isshi Resshin!- gritó.- ¡¿Haber cómo escapas de ésta?!

Una grieta cada vez más grande se fue abriendo paso hacia Daisuke. El suelo temblaba y se hundía bajo un gran abismo que no hacía más que rugir de la fricción del choque de las rocas.
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Spoiler:

La ocuridad fue disipada gracias al Kai de nivel Sannin del Anbu. Ahora tendría visibilidad, y por lo tanto, más ventaja. El rápido esquive por parte del enemigo no le sorprendió, cosa que sí hizo el terremoto. Era extraño que se le ocurriese utilizar otra técnica de Tierra contando él con el Rayo entre sus elementos.

Daisuke realizó sellos, convitritó sus huesos nuevamente en una sólida capa ósea para que no le molestasen en su próximo ataque, y se elevó hacia el cielo murmurando. Do-Raikiri. La técnica fue dirigida exitosamente contra Otoko. El joven Shimazu sabía que era una técnica inesquivable, y que cortaría el flujo del chakra Doton del shinobi. ¿Valioso?, no. No soy eso. Soy un simple peón más del juego. Pero ahora contéstame, ¿Cuáles son tus verdaderas intenciones? sabes que si intentas atacar esta aldea morirás, y yo me encargaré de ello. Dijo con firmeza, esperando en silencio la muerte de su oponente.

El Do-Raikiri dió de lleno sobre Otoko, partiéndole varios huesos y cortándo el flujo de chakra del elemento tierra que poseía. Otoko cayó, pero no tardó en levantarse de entre la arena. Éste se recolocó los huesos rotos sin inmutarse, sin pestañear, sin muestra alguna de dolor, era como si no sufriese. Él sabía que su enemigo nunca le vencería, pero el ANBU no lo sabía. Shimazu confiaba en sus habilidades y tenía una gran volundad. Cosa que hacía estremecerse a Otoko.

Tras enderezarse por completo, Otoko Kurai se dirigió muy serio y vacilante a Daisuke:

-Mocoso, estoy de regreso a la Arena. Hace mucho que no lucho, y me hacía ilusión probar a nuevos ninjas. Pero veo que no has sido lo suficientemente hábil como para ver que te estaba probando, solo jugaba contigo. ¿No has visto que cada vez he ido usando nuevas técnicas? Genjutsu, Ninjutsu, Taijutsu... Nunca he deseado matarte, de hecho, solo estoy divirtiéndome. Si quisiera matarte ya lo habría echo.- dijo irritado.- Aun me falta un tipo de jutsus que no me puedo olvidar.-

Tras el pequeño discurso, Otoko, empezó a hacer sellos, una secuencia que parecía interminable, larga, con gran cantidad de sellos especiales y que no tenía fin.

-Ninpo Kage Gome.- musitó.-

Una barrera de alambre apareció del suelo y protegió a Otoko, que seguía realizando sellos. Y que en un momento de ira realizó el siguiente jutsu recitando su nombre:

-¡Futton: Komu no jutsu!- dijo mientras expulsaba una gran cantidad de humo que se convertía en niebla.-

La niebla corrosiva era cada vez más peligrosa e iba derritiendo todo como si se tratase de una ola de fuego que arrasaba todo a su paso. Y si Daisuke Shimazu no se movía de ahí acabaría con graves quemaduras por todo su cuerpo, quemaduras que le serían fatales si no las tratase rápido.
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Spoiler:

El shinobi parecía inmortal. Esa jaula de alambre que había creado sería un grave problema, por el momento. ¿Sabes?, no está bien divertirse... -dijo aterrizando por la parte trasera de la jaula- ...sin dejar que los demás se diviertan. Éste será mi de mis últimos movimientos. Daisuke ya concentraba nuevamente su Raiton, preparándose para su siguiente ataque. La niebla fue disparada al frente, por lo que no le podría alcanzar sin antes pasar por delante de Otoko. Realizó más sellos, y concentró una cantidad mayor de Raiton, pronunciando. Kaminari Shibari. La niebla aún no había avanzado mucho desde que empezó a formarse, por lo que quedó encerrada al igual que su dueño. Daisuke recogió su camisa del suelo, y se la puso nuevamente.

Ya no encontraba necesidad de utilizar el Kaguya no Hune de una manera tan brusca como lo hizo al principio, así que se limitó a dejar su capa ósea. Miró al shinobi encerrado en la prisión del Kaminari Shibari, mientras cogía aire para hablar. Bien... ahora me vas a contestar, ¿acaso eres inmortal, seguidor del Jashin o sinónimo? volver a la aldea, y probarme, se nota que eres un ermitaño o simplemente un sabio de aquí. Te dejaré libre en cuanto me contestes, y si te queda algún poder oculto, no lo contengas más. Por cierto, ¿qué maneras son estas...? soy Daisuke Shimazu. Encantado. El joven Anbu miró nuevamente al shinobi. Sentía curiosidad por quién podría ser poseedor de tal fuerza, equiparable con la suya, o más.

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Técnica usada:
Raiton: Kaminari Shibari (Elemento de Rayo: Pared de Trueno); Es una técnica en la cual el usuario encierra a su oponente en una barrera hecha de energía eléctrica, la cual es imposible de romper.

-Eres listo. Tendré que luchar más inteligentemente.-

Otoko se hallaba atrapado dentro del "Raiton: Kaminari Shibari". La pared de truenos no le dejaba avanzar y era imposible de romper. Pero la niebla no había desaparecido, y aun, los secretos de Otoko no habían sido desentrañados. Otoko disfrutaba viendo como Daisuke no paraba de devolverle la pelota con su elemento Raiton.

-Te daré una clase de Ninjutsu. Verás. El elemento Raiton es muy potente ante el elemento Doton, puesto que éste está obligado a absorver la electricidad; pero el Raiton es muy débil contra otro elemento, el elemento Fuuton. Y también puedo ejecutar jutsus de ese elemento, ¿qué harás si lo uso?- preguntó.- Estoy rodeado, pero ni la barrera de alambre ni la pared de trueno.- sonrió Otoko.-

Otoko puso el sello de la serpiente, el sello que simbolizaba la prisión que creaba una serpiente constrictor al matar a su presa. La niebla corrosiva desapareció y el viento empezó a soplar muy fuerte. Otoko Kurai empezó una secuencia de sellos larga, muy larga. Y de pronto ejecutó el jutsu:

-Futon, Okki Tatsumaki.-

Un gran huracán surgió de la nada y levantó una gran tormenta de arena. A medida que avanzaba, iba absorviendo arena y poco a poco, el Kaminari Shibari. Tan rápido que cuando tomó suelo y una forma de embudo, y el cielo se tiño de negro, Otoko pronución una nueva frase, que acompañaba, además al huracán: ¡Kirin!. Un dragón formado por rayos surgió del huracán, y se disparó contra Daisuke, que no podía evitar el impacto de ningún modo. Éste podría ser su fin.

El dragón se lanzó hacia Shimazu, y cuando se le perdió de vista, el joven ANBU cayó al suello. El Kirin no había tocado los órganos vitales de Daisuke, solo le había hecho varios cortes profundos y muchos simples. El chico no se podía mover, su estado no le permitía moverse, estaba paralizado debido al dolor y a la descarga, aunque solo fuese momentáneo.

-Ahora te responderé a tus preguntas: no soy un Jashin ni similar. No soy ningún ermitaño, si un ninja de nivel Sannin. Mis poderes ocultos son eso, ocultos y solo de mi conocimiento; fin. Y ahora mi turno, te mostraré mi verdadera identidad, así puede que no te muestres tan recio y verás que solo soy un aliado que solo se ocultaba mientras se divertía.-

El ninja Otoko Kurai fue retirando su capucha, después su túnica. Tras ésto, muy cereminiosamente empezó a quitarse las vendas. Debajo de éstas se podía observar una indumentaria que le resultaba familiar. Konoha. Poco a poco fue mostrándose su cuerpo, hasta que al final solo quedó su rostro.

-Me conocen como el Sannin de la Hoja. Mi nombre ... es Ryushin Uchiha.- dijo mientras se desvendaba todo su rostro.- Me dirijo a la Arena para saludar al nuevo Kazekage de parte del Hokage.Te vi y me pareció conveniente no mostrarme, políticamente estoy exiliado. Por si tienes dudas, poseo el Sharingan de 3 aspas y si no estabas ambientado, puedo todos los jutsus que no pertenezcan a una barrera de sangre, de ahí que pueda usar todos esos elementos y jutsus, todas esas técnicas las he visto y copiado.- dijo mostrando su bandana rasgada.- Vi a un ANBU vigilando y decidí jugar un rato.-

Dicho ésto, tanto el dragón de agua que había aparecido de la nada, la barrera de alambre, y el huracán desaparecieron Ryushin le tendió la mano a su rival mientras decía en voz alta: "¡Vallamos a la Arena juntos, ha sido emocionante luchar contigo! Te llevaré a cuestas hasta que te recuperes, espero que me disculpes por los daños que te he causado.
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Spoiler:

Ryushin vio al ANBU y en cierto modo, se preocupó. Se había pasado bastante con el chiquillo. Acababa de propinarle un buen golpe a Shimazu, y éste le había dado las gracias. Definitivamente estaba en deuda con él, así que Ryushin lo cogió en brazos y empezó a andar. En la dirección señalada por el shinobi herido.

-¡Qué mala suerte, un poco más y la palma!- dijo apenado.- Conozco a medias La Villa Oculta de la Arena, pero si me cruzo con un ninja con Chakra médico y lo veo por mi sharingan le pediré ayuda.-

Ryushin comenzó a correr cada vez más rápido gracias al chakra del elemento rayo que había posado en las suelas de sus zapatos. "Si no llego rápido, sí que la va a palmar", decía el también joven Uchiha. Ryushin entró en la villa saltándose a los guardias de Suna, que le llamaron la atención y siguieron. Ryushin era muy veloz y hábil, así que simplemente se dejó seguir, pero no alcanzar.

-¡¡¡DETENTE!!!.- gritaban los Chounnin de Suna.- ¡¿A dónde llevas al pobre chaval?! ¡Suéltalo!-

-¡Qué cansino eres! ¡No le voy a soltar, es el líder ANBU de ésta aldea, yo tendría cuidado!

Lo más rápido que pudo llegó al hospital. Allí lo dejó, en la puerta y se marchó sin mediar palabra.
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Dirígete al hospital. En un ON-Rol, un ninja médico (PNJ) te atenderá. No te cobrará pues eres de la aldea. ¡Buena suerte, después nos juntaremos para ver al nuevo kazekage!